Después de leer documentos importantes acerca de los fundamentos éticos
y morales que debe tener cada ser humano, surge la necesidad de realizar una
reflexión crítica de cada aspecto mencionado en las teorías y conceptos
estudiados desde diferentes enfoques
QUE ES LA ÉTICA?
Los seres humanos somos
morales inevitablemente porque todos nos forjamos un carácter. (Ethos: que
quiere decir carácter). Y cada hombre es moral cada vez que toma decisiones;
prudentes o imprudentes, justas o injustas. La ética está vinculada con la
moral que rige el obrar correcto. La ética está marcada por normas que son la
base para diferenciar entre el bien y el mal.
Todos los seres humanos tienen
una estructura moral porque toda elección se toma con responsabilidad sin
importar cuál sea, por ejemplo: cuando una persona va a dar una respuesta no la
hace de manera automática si no que gracias al cerebro entiende el medio como
la realidad que la rodea e imagina cantidad de respuestas dependiendo del
contexto y lo que pasaría con cada respuesta.
Cuales creen que son las propuestas morales que podrían
extenderse universalmente?
Adela Cortina presenta en esta
ocasión solo 5 propuestas:
1.
Los derechos humanos y las capacidades básicas.
2.
La democracia como sistema político.
3.
La economía tendría que ayudar a formar nuevas
y buenas sociedades, crear riquezas al servicio de la sociedad
4.
La ciencia y la técnica : estar al servicio de
la dignidad humana al servicio de los hombres de la naturaleza y los animales
5.
Las Realizaciones.
PARA QUÉ SIRVE LA ÉTICA?
“La
ética sirve para ahorrar en aquello en lo que había que ahorrar y para gastar en
aquello en lo que sí que hay que gastar.”
Lo que quiere decir la filósofa
Adela Cortina con esta reflexión es que es la ética la que regula las
decisiones que deben tomarse en cada momento de la vida. En la sociedad y
hablando de política por ejemplo podemos ejemplificar el manejo de recursos que
por falta de ética no llegan a los
lugares indicados y mucho menos con los procedimientos correctos; esto solo por
resaltar un caso en el cual se pueden ahorrar recursos desperdiciados por su
mal empleo y se pueden ganar beneficios para los necesitados. La autora acaba
diciendo: “se han ido muchos dineros por
muchos sitios, que si se hubieran empleado en lo que se tienen que emplear nos
hubiera ido de una manera completamente distinta”.
¿por qué no estamos a la altura de nuestros sueños?
Se Plantean entonces tres
enfoques apoyados por varios autores desde hace siglos hasta la actualidad.
Religión: por
el pecado original
Filosofía: Mal
radical. Que el ser humano no puede hacer nada recto.
Neurología
y biología:
Se cuenta con una estructura
moral pero el ser humano no está preparado para llegar a la altura de lo que
quiere o sueña porque es inevitablemente egoísta. Egoísmo ocasionado por un gen
egoísta que hace que cada uno se ocupe de él mismo sin importar los demás. (Ser
altruista) Recordemos que el altruismo es la tendencia
a procurar el bien de las personas de manera desinteresada, incluso a costa del
interés propio.
La autora defiende que ese egoísmo
es porque queremos cuidar a los que nos rodean. Los padres a los hijos, cada
uno su pareja, etc. Pero el gran interrogante es: Es el ser humano capaz de ir
más allá y cuidar del prójimo que no es su familia? Entonces se empieza
hablar de NEPOTISMO (Trato de favor hacia
familiares o amigos, a los que se otorgan cargos o empleos públicos por el mero
hecho de serlo, sin tener en cuenta otros méritos.) y de cómo las
ventajas son dadas por el encargado solamente a sus familiares.
Pero los
seres humanos vamos más allá de la preocupación por nuestros parientes.
El ser humano es un reciproco, que lo hace altruista con los demás siempre y cuando tenga la seguridad de recibir algo a cambio ya sea en el mismo instante o a un plazo dilatado. Y todos somos reciprocas tendemos entonces a siempre dar para recibir, sembrar para cosechar como lo diríamos en nuestra cotidianidad.
El ser humano es un reciproco, que lo hace altruista con los demás siempre y cuando tenga la seguridad de recibir algo a cambio ya sea en el mismo instante o a un plazo dilatado. Y todos somos reciprocas tendemos entonces a siempre dar para recibir, sembrar para cosechar como lo diríamos en nuestra cotidianidad.
De alguna
manera esa reciprocidad está por delante del egoísmo puro y duro, y prevalece entonces
la capacidad de cooperar, y se cita entonces a Michael Tomasello en su libro “¿Por
qué cooperamos?” y la frase que dice: Nunca
veréis a dos chimpancés que lleven juntos un tronco. Lo seres humanos si
son capaces de colaborarse en estos casos, y así se hacen efectivas las
palabras de los viejos anarquistas: La ayuda mutua es la que hace que prosperen
las especies y no la lucha descarnada por la vida.
LAS
PERSONAS ADEMAS DE INTELIGENTES Y DE COOPERAR DEBEN TENER SENSIBILIDAD MORAL
Al referirse a la sensibilidad
moral habla del sentido de la justicia y de la gratuidad, que es el momento de
la sabiduría moral. Todo ser humano debe ir más allá, debe trabajar entonces en
dar y brindar a todas aquellas personas que no cumplirían con la reciprocidad
porque no tendrían nada que dar a cambio, ese grupo de personas que pasarían a
ser los excluidos de la sociedad.
Quienes
son esos excluidos? Acaso los de
otra raza o creencia? Al pasar los años esta autora se ha atrevido a afirmar
que son los pobres y usa un particular término para referirse a ese rechazo y
es APOROFOBIA.
La aporofobia (del
griego άπορος (á-poros), sin recursos, indigente, pobre; y φόβος, (-fobos),
miedo) es una fobia que representa el miedo hacia la pobreza o a los pobres.
Aunque también puede interpretarse como la repugnancia u hostilidad ante el
pobre, el sin recursos o el desamparado.
Lo que molesta es el pobre que
no tiene nada que ofrecer a cambio, porque el ser humano está preparado para
dar y para recibir.
“EL QUE SE CREE QUE NO NECESITA A NADIE,
SENCILLAMENTE ES ESTÚPIDO”
El individualismo es falso:
somos individuos que nos necesitamos unos a otros. Existe un vínculo entre
todos. Un vínculo profundo que rompe cada ser humano solo con dejar de saludar
a quien se encuentra en la calle. Y cuando una persona queda excluida todos
estamos perdiendo.
Todos tenemos necesidades que
no son derechos ni deberes como parte de la justicia, necesidad del afecto,
necesidad de consuelo y atención y eso se brinda solo desde la abundancia del
corazón. Es importante entonces trabajar en el sentido de la compasión; ese
compromiso para con el bien de los demás. Ligados así la justicia y la
gratuidad.
“ESE SENTIMIENTO EN EL QUE NOS SENTIMOS QUE SOMOS TODOS CARNE DE LA
MISMA CARNE Y SANGRE DE LA MISMA SANGRE”.
Para esto sirve la ética, para darnos cuenta de que esto lo que en el
fondo nos constituye, es nuestra verdadera realidad, y el mundo demuestra una
gran tristeza por el enorme abismo entre las declaraciones de lo que somos y
nuestras realizaciones.
SEAMOS ENTONCES RATONCITOS DE
CAMPO!
